1. Consulta previa a tratamiento; es una consulta con tu oncólogo radioterápico de referencia del hospital para planificar el tratamiento y aclarar dudas.
  2. Ese mismo día o unos días posteriores se realizará el TAC de planificación sin contraste IV. Se realiza el TAC del área cerviciotorácica para la obtención de imágenes que serán necesarias para planificar tu tratamiento de radioterapia. Se realizan tatuajes en piel y se hacen fotos para comprobar posicionamiento diario.
  3. El día de inicio del tratamiento radioterápico tendrá consulta con enfermería y una vez por semana será valorado además por su médico de referencia.
  4. Al terminar el tratamiento se le darán citas de seguimiento en consultas externas, la primera en 15 días – 1 mes y las posteriores alternando con los demás servicios implicados en su tratamiento, hasta dos tres años después.

Recomendaciones

  • Es muy importante que mantenga una dieta adecuada y que descanse lo necesario, algo más de lo habitual, aunque debe realizar alguna actividad física como el paseo.
  • Es importante que el oncólogo radioterapeuta conozca los medicamentos que está tomando por si debe modificarlos o añadir alguno más en algún momento de su tratamiento.
  • Es muy importante, si es mujer, no quedar embarazada mientras recibe el tratamiento. Consúltelo con un ginecólogo o médico.

Otras indicaciones

Vida saludable

  • No tomar alcohol.
  • No fumar.
  • Seguir la dieta que habitualmente haga, evitando picantes o irritantes (zumo de naranja, limón, vinagre, café…).
  • Si durante el tratamiento, usted está citado para otra prueba, se lo comunicará a las personas que le tratan para intentar adaptar el horario.

Cuidados de la piel

  • No aplicar nunca crema durante el tratamiento.
  • Es importante que las zonas de la piel donde se han pintado los campos, no se laven con jabón. No darse ninguna crema en el área de tratamiento sin consultarlo previamente con el médico.
  • No rasurar ni depilarse en la zona que recibe radioterapia.
  • No colocar esparadrapos en la zona de tratamiento.
  • En contacto con la zona de tratamiento es mejor ponerse prendas de algodón (ropa interior).
  • Las zonas de tratamiento, no deben recibir calor excesivo, ni deben ser expuestas al sol. Tampoco debe ponerse hielo.
  • Hacia el final del tratamiento, la piel de la zona puede ponerse un poco roja y se puede sentir picor. Otras veces puede oscurecerse y pelarse. Todo esto es pasajero y el médico le proporcionará en su visita semanal los remedios adecuados.